Un momento para los derrotados.
Para los oprimidos.
Para los que se sienten menos.
Un chance para los que no tienen voz.
Los que sufren en silencio.
Los que aguantan tantas espinas que ya no les queda sangre por derramar.
Un grito silencioso por los que no nos escuchamos.
Un lugar tranquilo en el cual desahogarse.
Solo un minuto, o quizás dos.
Unos brazos que se sientan cálidos o un lugar al que podamos llamar hogar.
Pido personas empáticas, amables, cariñosas, personas con mucha luz para que le brinden a los que somos oscuridad. Pido calor entre tanto frío.
Un minuto, o quizás dos.
Un momento para ser feliz, un recuerdo bonito que sea una razón para vivir.
Un momento para los derrotados.
Para los oprimidos.
Para los que se sienten menos.
Un chance para los que no tienen voz.
Los que sufren en silencio.
Los que aguantan tantas espinas que ya no les queda sangre por derramar.
Un grito silencioso por los que no nos escuchamos.
Un lugar tranquilo en el cual desahogarse.
Solo un minuto, o quizás dos.
Unos brazos que se sientan cálidos o un lugar al que podamos llamar hogar.
Pido personas empáticas, amables, cariñosas, personas con mucha luz para que le brinden a los que somos oscuridad.
Pido calor entre tanto frío.
Un minuto, o quizás dos.
Un momento para ser feliz, un recuerdo bonito que sea una razón para vivir.
Escritora creativa en proceso 